Por Germán Alberto Bahamón J
Hace veinte semanas me tracé un propósito: servir
a la ciudad que me vio nacer hace 40 años y la sociedad que me formó con
valores que a la postre me permitieron progresar en lo académico y ascender en
lo profesional. Pongo a consideración mi
experiencia de 18 años en el sector privado en compañías como La Alquería,
Kimberly-Clark, Sony Corporation y Jaroca, todas importantes en su mercado. Con
Sony trabajé durante 12 años, teniendo diferentes posiciones de responsabilidad
no solo en mi país. A los 30 años fui
Gerente General en Ecuador, luego de Centro América y el Caribe con sede en
Panamá, de allí fui promovido al mercado más importante de la región como lo es
México y finalmente me desempeñe en un cargo directivo con responsabilidad en
toda Latinoamérica. Todas las experiencias fueron gratificantes y gracias a las
personas que trabajaron conmigo, obtuvimos reconocimientos por cumplimiento de
objetivos, por eficacia en la ejecución y por la pasión con la que se asumían
los retos.
En mis estudios decidí como Huilense,
cursar Ingeniería de Producción Agroindustrial en la Universidad de la Sabana,
consciente de las grandes oportunidades que supone un pueblo agrícola en la
transformación de bienes y la comercialización de producto con valor agregado. Identifiqué
la necesidad de ser bilingüe y con mucho esfuerzo salí a capacitarme en
Inglaterra y luego con ayuda de créditos también hice estudios de postgrado en
Mercadeo Estratégico en el CESA en Bogotá y estudios superiores en Administración
en Kellogg University en Chicago. Una hoja de vida hecha a pulso.
Entiendo la política como el arte de
servir, y el objetivo de la política: el bienestar social. Estoy convencido que
quien llegue a liderar el equipo de la alcaldía, debe tener experiencia probada
en manejo de equipos competitivos, técnicos y profesionales. Con capacidad para
incrustar la ciudad en un contexto de economía abierta y global. Para saber que
la generación de riqueza y de bienestar, provienen del éxito de apuestas productivas
y competitivas como en la empresa privada. Y que entienda que ya no hay ciudad
aislada, sino que vivimos en una red de ciudades en la cual debemos identificar
el rol que queremos asumir y concentrar esfuerzos para ser relevantes. Todo lo
anterior necesita de una experiencia gerencial, para no solo diseñar los planes
de acción, sino y más importante, gestionar ante entes nacionales y
multinacionales inversiones que permitan que nuestra industria crezca y nuestro
comercio progrese. Solo el desarrollo económico a través de la industria y con
educación de calidad, podrán ser los responsables de la transformación social.
Esto ya paso en Montería, ya pasó en
Barranquilla y ahora por Neiva SUMATE AL CAMBIO.